Cuando hablamos del tipos de piel en el calzado, la mayoría de las veces nos referimos al acabado en el calzado de cuero. Es decir, los procesos por los que pasa la piel, previamente curtida, para conseguir un tipo concreto de textura final. Por eso, dos zapatos hechos de la misma pieza de piel de vacuno, por ejemplo, pueden ser completamente diferentes a nuestros ojos y tacto, a pesar de estar fabricados con el mismo material.
Aunque el calzado confeccionado con piel tiene cada vez más adeptos, gracias a la calidad, comodidad y resistencia que aportan a quienes los llevan puestos, rara vez reparamos en los múltiples matices y diferencias que los distintos tipos de acabado confieren a un mismo tipo de piel.
Así, durante los procesos de acabado, el cuero tratado recibe propiedades muy concretas en cuanto a brillo, tono, grabado… muy relacionadas con ese componente de moda que tiene la amplia mayoría de zapatos.
Pero no sólo se trata de belleza. Sino que los diferentes tratamientos a los que se someten las pieles, las hacen más resistentes a factores externos. Como la humedad, los golpes o los arañazos.
Ya que contaros demasiadas cuestiones técnicas sobre el acabado en el calzado de cuero podría resultar tedioso o poco interesante, vamos a mostraros únicamente aquellos que encontráis de forma habitual en vuestros propios zapatos. Estamos seguros de que a partir de hoy podrás distinguirlos sin ningún problema.
¿Preparados para convertiros en expertos?
TIPOS DE PIEL EN EL CALZADO SEGÚN SU ORIGEN Y ACABADO
- Full Grain Leather: Se trata de la capa más exterior de la piel y se caracteriza por tener una apariencia imperfecta y natural, ya que deja al descubierto los arañazos y cicatrices propios del cuero.
- Anilina, o lo que es lo mismo, la piel que no ha recibido tratamiento alguno. Muy sensible a las manchas y desde luego, a la humedad.
- Semi-anilina, es decir, la piel a la que se ha aplicado un tinte o pigmento. Haciéndolo más resistente y dotándolo del color envejecido propio del cuero.
- Charol: Este acabado es tan particular y distinto a los demás que muchas veces ignoramos que se trata de auténtica piel a la que se le han aplicado varias capas de poliuretano. Aunque también puede realizarse a partir de materiales sintéticos. El cuero con acabado charol es muy resistente al agua y fácil de limpiar. Sin olvidarnos del alto componente de moda que encierran los zapatos de charol.
A continuación, revisaremos los distintos acabados afelpados que encontramos habitualmente en el calzado, pues resulta más difícil distinguirlos a simple vista sino se tienen unas nociones básicas.
¿QUÉ ES LA PIEL AFELPADA?
Serraje, ante y nobuck son los tipos de piel en el calzado que nunca sabemos cómo encajar. Aunque la diferencia básicamente radica en la capa y el lado de la piel sobre la que trabaja y se aplican los distintos procesos.
- Serraje: Se obtiene lijando la parte interna de la piel, tras retirar la capa más superficial de la misma o serrando en finas capas una capa de piel, obteniendo un cuero muy suave, resistente y transpirable. Aporta acabados muy bonitos a nuestros zapatos, haciéndolos realmente cómodos.
- Ante: La piel sobre la que se trabaja para obtener el ante se denomina “piel vuelta” o “del revés”. No es otra cosa que la parte de piel que está en contacto con la carne. Lo contrario a la capa exterior que se utiliza para obtener el cuero Full Grain Leather.
Los zapatos de ante suelen fabricarse con pieles de cordero o cabra. Resulta muy suave, aunque poco resistentes sino los cuida.
- Nobuck: Es una piel muy parecida al ante pero al contrario que sucedía con este, se trabaja sobre la parte exterior de la piel de vacuno. También conocida como “flor”. Realizando un fino lijado sobre la misma, consiguiendo una textura muy suave que recuerda a la piel de melocotón.
¿QUÉ TIENEN LOS DISTINTOS TIPOS DE PIEL EN COMÚN?
Aunque los diferentes acabados y tratamientos confieren diferentes propiedades y niveles a las pieles, todas ellas tienes un denominador común. Sobre todo si hablamos de calzado hecho en España. La calidad.
Las cualidades de un zapato fabricado en piel natural, te proporcionarán siempre un mayor bienestar que el calzado fabricado con fibras sintéticas y materiales plásticos. Entre otras ventajas, los zapatos de cuero son más duraderos. No se deforman ni se dan de sí con el paso del tiempo, provocan una menor transpiración de los pies, evitando el exceso de sudoración.
En cualquier caso, creemos que también puede resultar interesante conocer dos tipos de piel en el calzado que resultan, cuanto menos, particulares.
DERIVADOS DE LA PIEL EN EL CALZADO
- Cuero reconstruido o Bonded Leather: Se trata de un material sintético. Resulta de combinar poliuretano o vinilo con látex y trozos de piel. Un acabado que dista mucho de los cueros reales en cuanto a calidad y resistencia.
- Piel Sintética: Se trata de una imitación artificial del cuero. Utilizando materiales textiles que han sido modificados para tener un aspecto semejante a las pieles naturales.
Aunque su precio resulta más económico que el cuero auténtico, los materiales plásticos con los que suele estar fabricada la piel sintética, hacen que sea poco transpirable. Y menos confortable para los pies.
Hasta aquí nuestro exhaustivo repaso a los tipos de piel en el calzado. Esperamos que os haya resultado útil e interesante.
Gracias por la visita y… ¡nos vemos en el siguiente post!